En primer lugar la cantidad de gente que había, fue impresionante, como si fueran fiestas de Vitoria pero la gente en vez de ir de Blusa iba con los hábitos de Nazarenos... y no solo eso sino también la fiesta que había, una tanto peculiar... lo del botellón en cualquier parte no lo habíamos visto jamás... daba igual donde miraras allí había una cuadrilla. Bueno y no solo eso , sino que a la noche, buscando un sitio para sobar dinos con el parking fiesta¡¡¡ toda la peña con el coche abierto la música a tope y bebiendo como locos...
Bueno, y tras ver Cuenca, decidimos ir a la ciudada encantada, otra zona muy conocida de por allí. La verdad que el sitio prometía, aunque el tiempo se volvió un poco loco y empezó a nevar... sí sí pegó una nevada impresionante.
Y lógicamente no nos quedó más remedio que meternos en la caracola... poner la calefacción a tope y hacernos algo de comer calentito para recuperar... porque hacía un frio de la leche
Un besote para todos y a ser buenos eh??
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